Tener un novio mayor es, para muchas, chicas una gran proeza, puesto que se “siente” bien que un chico de secundaria, prepa o universidad tenga una novia más joven. Que él se fije en ti y te elija de entre todas las niñas de su edad, del vecindario o de la escuela.

“Yo me sentía la chava más madura de todas mis compañeras por tener un novio mayor. Cuando él —que cursaba la preparatoria— iba por mí a la secundaria, todos me miraban, especialmente porque llevaba un auto que le acababa de regalar su papá por entrar a la prepa. Además  hacíamos ‘cosas de grandes’, como besarnos de lengüita, fajarnos y, al paso del tiempo, también nos masturbarnos. Hasta que nos cacharon en mi casa y ya no me permitían “andar” con él.”

María, hoy de 30 años de edad

Sin embargo, tener un novio grande significa para muchas otras niñas y adolescentes que tienen que satisfacer la solicitudes de ese ser, puesto que si no lo haces te amenaza con dejarte o platicar todo lo privado que hace contigo. La mayoría de las veces te chantajea, ofende, denigra y lastima con sus acciones o palabras.

“Mi novio iba en la universidad… yo, en la secundaria. Él era mayor de edad y yo no había ni cumplido los 15 años cuando comenzamos a tener relaciones sexuales. Yo prefería ir al cine, por un helado o simplemente vernos en el parque. Me sentía muy presionada si no accedía a verlo cuando él quería, donde quería y a la hora que quería. Un día me dijo: ‘ya no quiero estar contigo, todavía eres una niña’ y comenzó a salir con otra chica de su escuela. Yo, me sentí morir.”

Sandy, hoy de 18 años de edad

La mayoría de niñas y adolescentes que tienen relaciones amorosas y/o sexuales con hombres mayores que ellas, viven un noviazgo de violencia, engaño y manipulación. Ellas no están preparadas para afrontar la responsabilidad de tener relaciones sexuales (un embarazo no deseado, una infección de transmisión sexual, la carga emocional y psicológica de sentirse o no “mujer”). Y muchas veces son abandonadas cuando se embarazan o enferman.

“Yo no quería ser mamá, pero según yo ‘amaba’ mucho a mi novio. Tenía apenas 16 años cuando comencé a salir con él, y lo primero que me dijo que debía demostrarle cuánto lo quería y desde el primer momento comenzamos a tener relaciones sexuales, casi todos los días porque a él le gustaba mucho y yo solo quería estar con él. Así que a los pocos meses me embaracé y me dio que no era de él, su familia se lo llevó y me dejó con toda la responsabilidad”.

Carina, hoy de 20 años de edad y una hija de cuatro.

De acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo, 2018) la edad de los progenitores de los hijos de las niñas de 15 años o menos, que son madres por primera vez, son las siguientes:

0.8% de los casos tenían la misma edad

40% de los casos tenían entre 16 y 19 años

23% de los casos tenían entre 20 y 29 años de edad

4% tenían más de 30 años de edad

28% de los casos la edad era desconocida (porque fue violencia sexual o porque protegían al adulto por tener relaciones con una menor de edad)

3% no quiso decir la edad de la persona

Es muy complicado que una niña y adolescente, que no recibe educación sexual en su centro educativo, en su casa o en el médico, tenga la capacidad de tomar una decisión consciente en torno a su sexualidad, especialmente si es presionada por el chico que le gusta o por sentirse confundida en torno a “ese primer amor”.

“Yo creía que a nadie le iba a gustar, solo a mi novio de la secundaria (yo iba en primero y él estaba recursando el tercero de secundaria) así que todo lo que él me decía yo simplemente le decía que sí. Acepté que hiciera conmigo lo que quería, mis padres nunca estaban y a mis hermanos mayores no les importaba. Yo creía que amor era lo mismo que sexo”.

Adriana, hoy de 21 años de edad y un hijo varón de 8 años, y una nena de dos.

Si te sientes confundida en torno al amor, el sexo, la anticoncepción, los sentimientos, el deseo, la maternidad, el noviazgo o cualquier tema, ¡llámanos! en MSI Marie Stopes estamos para ayudarte.  Recuerda que nunca debes tener sexo si no quieres. Toma en cuenta que es tu vida, tu futuro y tus sueños. Los hijos son muy lindos, pero no para ti que eres aún una niña. Y si estás pensando en tener sexo con tu novio, antes ven por un anticonceptivo y usa siempre condón.

Por Guadalupe Camacho, @Lupichick, periodista y académica mexicana