No solo se trata del caso del “Monstruo de Ecatepec”, los feminicidios y las desapariciones en México tienen niveles alarmantes desde hace mucho.«¿Qué pasa en el Estado de México a diferencia de otros estados? ¿Qué pasa con la violencia feminicida y las desapariciones de mujeres? ¿Por qué las cifras siguen en aumento?», estas son algunas de las preguntas que se hace Alex Guzmán ante el alarmante caso del presunto feminicida a quien la prensa llamó «Monstruo de Ecatepec». Se trata del último caso que provocó terror en el barrio Jardines de Morelos del municipio de Ecatepec de Morelos, Estado de México. El jueves 4 de octubre, Juan Carlos «N» fue detenido en compañía de su pareja Patricia «N»; cuando llevaban una carriola con restos humanos. Al revisar dos domicilios de la pareja, las autoridades encontraron más restos humanos en un refrigerador y en cubetas de plástico. En el transcurso de los días, Juan Carlos «N» aseguró haber matado a 20 mujeres, además de vender a una niña y huesos de sus víctimas. El caso que atrajo la atención de los medios de comunicación y de cierto sector de la población no reveló algo nuevo: la violencia contra la mujer y la impunidad para investigar los feminicidios. La periodista Valeria Durán documentó que de enero de 2012 a junio de 2016 las autoridades de las 32 entidades reportaron que fueron asesinadas en forma violenta en todo el país 9 mil 581 mujeres, pero sólo 1,887 de esos crímenes fueron tipificados como feminicidios, es decir, menos de 1 de cada 5.

Edomex y la alerta de género

El Estado de México es uno de los 13 estados de la República que tiene Alerta de Género, que consiste en un «conjunto de acciones gubernamentales de emergencia para enfrentar y erradicar la violencia feminicida y/o la existencia de un agravio comparado que impida el ejercicio pleno de los derechos humanos de las mujeres». Fue el 31 de julio de 2015 cuando se declaró una Alerta de Género por violencia feminicida en 11 municipios de la entidad: Ecatepec de Morelos, Nezahualcóyotl, Tlalnepantla de Baz, Toluca de Lerdo, Chalco, Chimalhuacán, Naucalpan de Juárez, Tultitlán, Ixtapaluca, Valle de Chalco y Cuautitlán Izcallí. Ante la crisis de desapariciones de mujeres, niñas y adolescentes, varias organizaciones solicitaron en septiembre pasado una segunda Alerta de Género en el Estado de México. «En la segunda solicitud de Alerta de Género apuntamos que el tema de la desaparición de mujeres en Estado de México, principalmente en 7 municipios, entre ellos Ecatepec, es alarmante», dice Alex Guzmán, integrante del área de defensa de Idheas, Litigio Estratégico en Derechos Humanos, una de las organizaciones que promovió la alerta. Con 16 millones de personas, el Estado de México es la entidad con el mayor número de casos de mujeres, adolescentes y niñas desaparecidas del país con un total de 1,790 casos oficialmente registrados, de acuerdo con datos del Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED). Mientras que el porcentaje de mujeres desaparecidas a nivel nacional es el 25% del total de las personas desaparecidas, en el Edomex ese porcentaje asciende al 46%, según documentó Idheas en su informe Desaparición de mujeres, adolescentes y niñas en el Estado de México. En el tema de la desaparición concurren otros delitos como la trata de personas, secuestro y detenciones ilegales, explica Guzmán. «Muchas veces las desapariciones son la antesala a un feminicidio, como es en estos casos».

La impunidad

El mensaje es contundente con feminicidios que no se investigan como tal y con tan pocas sentencias condenatorias. Aunque Alex Guzmán reconoce algunos avances institucionales en el estado, como la creación de una Fiscalía Especializada para la Investigación de la Desaparición Forzada, la integración del Protocolo Alba (que ordena la búsqueda especializada con perspectiva de género para desapariciones de mujeres), las células de búsqueda de primer contacto ante desaparición y el programa Odisea (que acelera el proceso de recolección de información y la difusión de las fichas técnicas de las personas desaparecidas), hay cuestiones estructurales que no se han atendido, como el actuar de quiénes operan el sistema de procuración o impartición de justicia. Para Guzmán, los operadores del sistema de justicia replican estereotipos de género e imposibilitan o inhiben al acceso a la justicia. La organización Idheas pidió a las autoridades del estado realizar análisis de contexto en la investigación, pues sin este se invisibiliza «la problemática estructural y generalizada de violencia en contra de las mujeres en Ecatepec, y en el Estado de México». El manejo de las autoridades en el caso que conmocionó al país ha sido tan deficiente que la organización advirtió a las autoridades de Edomex que la filtración de la declaración de Juan Carlos «N» a los medios de comunicación «pone en riesgo la investigación, la cadena de custodia y el debido proceso», advierte Guzmán. Con información de Huffingtonpost]]>